Mostrando entradas con la etiqueta películas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta películas. Mostrar todas las entradas

martes, 6 de agosto de 2013

Bridget Jones y yo

0 comentarios
 

Yo conocí a Bridget Jones, como la mayoría de ustedes, en el cine. Así, de a casualidad, como suceden las mejores cosas. Lo recuerdo como una experiencia medio traumática. Verán, yo sufro de una cosa que no puede llamarse de otra forma más que “pena ajena”. En serio. Me da como picazón ver a la gente hacer estupideces enfrente mío. La paso mal. No puedo explicarlo.

Muchos años después descubrí que esa empatía era una cosa buena. Ayudaba al escribir. Pero, en esos tiempos, prefería simplemente evitar las situaciones que me ponían incomoda.
Y luego, fui al cine a ver la primera película de Bridget Jones.

No sabía nada de ella. No conocía muy bien a los actores. Ella era, para mí, la chica de Jerry Maguire.  Hugh Grant era Hugh Grant. Y, el otro tipo, era simplemente uno que me parecía haber visto una vez. No estaba segura en que película (Fue en Shakespeare in Love).

Como cambian los años. Ahora conozco a Bridget mejor. No solo conozco a Bridget la de las películas, sino que tuve la dicha de conocer a la Bridget original, la de los libros. Me dio mucha menos pena ajena (porque, obviamente, es más difícil sentir pena ajena al leer un libro, pero también porque, en el fondo, ahora la entendía mejor).

Ya casi se me olvidó quien era Hugh Grant, pero puedo decirte exactamente quien es Colin Firth. Con lujo de detalles. También puedo decirte quien es Renee Zellweger, aunque los detalles sobre ella no me interesan tanto.

Por lo que, cuando Helen Fielding anunció, hace poco, que 14 años después, íbamos a ver a Bridget de nuevo (leer sobre ella primero, verla posteriormente), la noticia no me causó tanta preocupación como antes (cuando uno comienza a experimentar pena propia, supera un poco la pena ajena). Es más, lo primero que hice fue preguntarle a mi amigo Google cuando era que salía el libro.  Es mejor prepararse. Digo, es la única manera de disfrutar a Colin Firth. Y a Bridget, claro está. A Bridget. Sí. Bridget. La que habla sin pensar. La que, muchas veces, actúa sin pensar. Esa Bridget. La que, por más que trata, sigue siendo ella misma. Es Bridget. La que me gustaría haber escrito yo.

jueves, 30 de agosto de 2012

(Top 10)* movie quotes que son parte de nuestra cultura

0 comentarios
 

 
Casi no escribo sobre películas aquí, es cierto, pero desde que escribí sobre las primeras líneas de libros vengo pensando que vale la pena hacer una lista parecida de películas. Pero no las primeras líneas, ni las últimas. Sino simplemente, esas que todo el mundo recuerda. Esas frases épicas. Las que citamos, over and over again. Las que usamos en momentos específicos de nuestra vida. Las que, sin darnos cuenta, ya son parte de nuestro vocabulario. Las que definirán la película en nuestra memoria, forever and ever

Y, pues, si estas tampoco terminan siendo 10, pido disculpas de antemano. Hay demasiadas películas buenas. 
  1. I’ll go home and I’ll think of some way to get him back. After all, tomorrow is another day!” Gone with the Wind. 1939. Mucha gente prefiere la aún más famosa "Frankly, my dear, I don't give a damn".  Yo no soy una de esas. Esta tiene algo más de posibilidad. Y, aunque no es tan citable, me sigue gustando más.
  2.  “I do wish we could chat longer, but I'm having an old friend for dinner," The Silence of the Lambs.1991. El maestro de los juegos de palabras, Hannibal Lecter, en una actuación memorable de Anthony Hopkins, nos deja con esto, el mejor final. El de no saber lo que viene después.
  3. "I'm going to make him an offer he can't refuse." The Godfather. 1972. ¿Hay algún movie quote más conocido que este? Lo triste es que hay gente que lo cita y no ha visto la película. Vean la película. Las tres películas. Valen la pena, y tendrán muchas más citas.
  4. "Mama always said life was like a box of chocolates. You never know what you're gonna get.” Forrest Gump. 1994. No, en verdad no sabes. Y, como esta película prueba, a veces ni sabes que películas te van a gustar. Por eso, de vez en cuando, vale la pena experimentar.
  5. Do or do not... there is no try.” The Empire Strikes Back. 1980. Oh, Yoda. Esta es una de esas citas que uso para todo. Además, de vez en cuando, en momentos random, hablo como Yoda, así, al revés. ¿Qué? ¿Ustedes no?
  6. “But why is the rum gone?” Pirates of the Caribbean: The Curse of the Black Pearl. 2003. Si definimos una buena cita como esa que usas en tu vida diaria hasta que, en algún momento, se vuelve parte de tu vocabulario, pues esta se merece un espacio en la lista, ¿no creen?
  7. "The first rule of Fight Club is - you do not talk about Fight Club. The second rule of Fight Club is - you DO NOT talk about Fight Club." Fight Club. 1999. Otra de esas que se usan para todo. No lo nieguen. Todo el mundo la usa. Y, además…es Brad Pitt.
  8. "I wish I knew how to quit you". Brokeback Mountain. 2005. A mi esta línea me parece el colmo del romance. Seriamente. Hace que me ponga como la carita esa del Whatsapp con los corazoncitos en los ojos. Así.
  9. “As you wish." The Princes Bride. 1987. Las palabras que han reemplazado, for good, a I love you, en el vocabulario de cualquier persona que ha visto la película o leído el libro.
  10. "My Precious." The Lord of the Rings: The Two Towers. 2002. Siempre me imagino esta cita con la palabra precious escrita algo así como preciooooouuuuusssss. La verdad es que, esta también la cito mucho. Especialmente para referirme a mis zapatos. Si, mis zapatos. No comments.
  11. To Infinity and beyond!” Toy Story. 1995. Esta es como la de Pinky y Cerebro (que no es una película, así que se queda fuera de la lista), citada al menos, una vez por semana. Particularmente cuando alguien pregunta cosas como ¿qué vas a hacer? ¿a donde vas? etc. y tu no quieres contestar.
  12. Roads? Where we're going, we don't need roads.” Back to the Future. 1985 Y continuaría…y continuó. La película que hizo que amara la ciencia ficción y odiara los viajes por el tiempo. La última línea nos habla del viaje que viene, y ese siempre es el mejor viaje.
  13.   “You had me at ‘hello’” Jerry Maguire. 1996. Ah, tiempos aquellos. Cuando Tom Cruise no nos parecía un chiflado. Cuando hasta disfrutábamos de sus películas.  
  14. “Always look on the bright side of life”. Life of Brian. 1979. Pero esta hay que decirla cantando, eh. Que si no, pues no funciona. Cantando. Y alto.

jueves, 19 de julio de 2012

Finales felices vs. Finales Tristes

0 comentarios
 

La gente que me conoce podría decirles que tengo mis momentos de masoquismo. No siempre que me siento mal tomo medicinas enseguida y, a veces, me gusta dejar las cosas hasta el último último momento aunque sé que es lo peor que puedo hacer. No me gustan las cosas fáciles, que puedo decirles. Me gusta la presión.  

Pero en esta discusión del vivieron felices para siempre vs. la realidad tiendo a ser medio bipolar. Cuando voy al cine a ver una película, o cuando me obsesiono con un programa de televisión (pasa bastante a menudo. Un día de estos voy a tener que darles una lista de TODOS los programas que veo. Se van a asustar), o cuando leo un libro…pues, las lecciones me valen poco.  Lo que viene después no me importa. El apegarse a la realidad me parece ridículo. Yo, yo veo porque estoy esperando un final feliz.

Me lo merezco. Si me he aguantado ocho temporadas viendo a Mulder ya  Scully, pues es injusto que juuusto cuando POR FIN pasa algo entre ellos, yo no pueda verlo. Y ni me hagan hablar de todo lo que sufrí la primera, y bueno, la segunda y la tercera vez que leí “Lo que el viento se llevó”. Ahí estaba mi final feliz, tan cerca que podía tocarlo…y de repente…se esfumó. 

No, no. Yo quiero que mis personajes favoritos vivan felices para siempre, aunque en la felicidad hayan menos historias. La imaginación, esa es para otras cosas que no sean para tratar de arreglar lo que otro escritor decidió debía apegarse a la realidad.

Pero, cuando escribo…ay, cuando escribo. Es triste como la perspectiva cambia. De repente entiendo perfectamente a esos escritores que tanto me hacen sufrir. Si hay una cosa que no me gustan son los finales felices. Es más, no soy muy fanática de los finales en general. A mí me gusta dejar las cosas abiertas, así…para que cada uno haga su propio final. ¿Qué gracia tiene contar una historia que no da cabida a la imaginación?

Y pues, si…esto debería hacerme entender mejor a todos aquellos que, alguna vez, he odiado por aquel final. Pero, en verdad, no lo hace. En este tema me reservo el derecho de mantenerme bipolar. Ustedes denme mis finales felices. Yo no prometo escribirlos. Y pues, si tienen que odiarme por ello, bienvenido sean. Ustedes también tienen derechos.
 
© 2012. Design by Main-Blogger - Blogger Template and Blogging Stuff