Mostrando entradas con la etiqueta feminism. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta feminism. Mostrar todas las entradas

miércoles, 25 de febrero de 2015

#HistoriasdeAcoso

2 comentarios
 
Es un tema medio escabroso. De esos de los que todo el mundo tiene una opinión. Y sin embargo, yo, INGENUAMENTE, pensé que el debate causado por el bien intencionado pero completamente inefectivo proyecto de ley “anti-piropos” presentado ante la Asamblea, sería algo bueno. Siempre es mejor hablar del tema, pensé. Discutirlo. Que la gente lo entienda.

Mi error, entiendo ahora, fue dar por sentado que todo el mundo estaba en la capacidad de entender.

Ser mujer y salir a la calle es una cosa complicada. Suena exagerado, pero es así. Hay miles de cosas que uno tiene que pensar antes de dar el primer paso fuera de su casa. Y no solo son las normales  (me veo bien, esta ropa combina, etc.), sino también las inverosímiles, (estoy vestida  de forma apropiada para el área de la ciudad a la que me dirijo, llevo algo en mi cartera con lo que pueda protegerme si me atacan). Salir a la calle significa, a veces, tragarse la dignidad, sonreír a pesar de todo, mantener la frente en alto cuando se tienen ganas de llorar.

No exagero. En serio. Las palabras no hacen daño, leí por ahí esta semana. Pero es mentira. Hieren. Causan miedo. Asco. Rabia. Deberían sentirse halagadas, escuché también por ahí. A otras ni les hacen caso. Y me reí. Me reí porque la única otra respuesta posible era llorar, y la persona que dijo semejante cosa no se merece mis lágrimas. Me reí porque ya no solo me tengo que aguantar que me falten al respeto, tengo que disfrutarlo. Es un cumplido. Un piropo.

Quizás, lo peor que escuché fue la frase: Hay libertad de expresión. Me ha tomado un par de días procesarla. Entender que respuesta debo dar a esta idea. Hace no mucho escribí sobre respetar el derecho ajeno, justo después de los atentados de Charlie Hebdo. Este tipo de pensamiento va en contra de esa idea. Hay libertad de expresión, sí. Eres libre de ser un cerdo machista si quieres, pero no eres libre de acosarme a MÍ, individualmente, por tus creencias. La libertad no incluye el acoso, la intimidación, el atropello. Burlarse de una figura pública en un periódico dista mucho, muchísimo de que 3 hombres te griten a ti, a cinco metros de distancia, todo lo que quieren hacerte.

Así son los panameños, añadió alguien, como la cereza del pastel. Esos son los piropos que saben. Habrá que aguantarse.

Y no. A mí no me gustan este tipo de piropos. No me da la gana de soportarlo, ni de tener que cambiarme de acera para poder mantener un poco de dignidad, ni de pensar dos veces si debo salir a comprar comida porque en la esquina hay cinco trabajadores de construcción juntos, y tengo que pasar por ahí, no hay forma de evitarlo. A mí no me gusta ser un objeto. Y soy persona. Y las personas decimos basta. Hasta aquí. No aguanto más. 

martes, 25 de noviembre de 2014

Día Internacional de la No-violencia contra la Mujer

0 comentarios
 
Me pregunto que se dice un día como hoy. ¿Cómo comienzas la conversación? ¿Cuál es la frase de rigor?  ¿Feliz día Internacional de la No-violencia contra la Mujer? Un poco larga la frase, por no decir un tanto absurda. Y ¿a quién se supone que debo felicitar? ¿A las mujeres por sobrevivir? ¿A los hombres no violentos? ¿A la sociedad que avanza a pasos agigantados y a pesar de eso todavía necesita de un día como este?

No. Creo que no hay que felicitar a nadie. Así no comienza el diálogo.

Tal vez comienza así: Yo soy mujer, y hoy me doy cuenta de lo afortunada que soy. Nunca he sido violada ni he sufrido ningún tipo de violencia física por el hecho de serlo. Como toda mujer, sin embargo, he hecho el mismo trabajo que un hombre por mucho menos sueldo. Me han hecho sentir incomoda, insegura y preocupada. He caminado hacia mi carro de noche mirando hacia todos lados con las llaves en la mano, por si acaso necesito usarlas como arma.

He tenido que aguantar “cumplidos” al caminar por la calle. He aprendido que es mejor alejarse que decir que no. He sentido miedo.

Aun así, yo soy de las dichosas. El miedo a algo que puede pasarte es infinitamente mejor que el miedo a algo que ocurre todos los días. (En India, en Afganistán, en Siria, en Honduras, en todos lados)

Repito. No hay que felicitar a nadie el día de hoy. (No es un día de esos). Ni siquiera vale felicitarnos a nosotros mismos por lo mucho que hemos avanzado. (No hemos avanzado lo suficiente). Hoy, simplemente, nos toca abrir los ojos. Mirar. Entender, quizás. No el feminismo. No las muchas razones que tienen las mujeres para sentirse oprimidas, asustadas, menospreciadas. No. Esa es la discusión de todos los días. Esa es la pelea de igualdad. Esa sigue viva, pero no es la de hoy. La de hoy es por aquellas mujeres que no pelean simplemente por ser iguales, que no pelean por una educación, que no pelean por una voz, sino que pelean por sus vidas.

Suena absurdo que todavía se necesite un día como hoy. Pero así somos. Aquí estamos. Tal vez (sueño maravilloso) en quince, veinte, cuarenta años esta fecha resulte absurda. Ojalá sea así.  Ojalá me toque verlo. Mientras tanto, no me queda más que decirlo en alto. Gritar. Por las hermanas Mirabal. Por aquella mujer en India, y la otra, y aquella en Afganistán, y en Honduras, y en muchos otros lugares. Por ellas, y por todas nosotras.   


miércoles, 28 de mayo de 2014

#YesAllWomen

0 comentarios
 
Have felt afraid to walk somewhere in the dark
.
Have had to endure catcalls and nasty pickup-lines

Have been called darling, honey, love, or something of the sort in regular conversation, often by people you don’t even know.

Have been ridiculed for dressing too conservative, too sexy, and sometimes both. AT THE SAME TIME.

Have had a professor who has stared at their boobs the entire class.

Have been judged by the way they dress.

Have been called slut, whore or another derivative. (Either that, or a prude)

Have bought/considered buying /wished they owned pepper spray.

Have texted a friend to say they got home safe.

Because, no #NotallMen harass women, but #YesAllWomen have felt harassed at some point or another.


Yes, yes, yes. 

lunes, 8 de abril de 2013

Margaret Thatcher, or how the way was paved.

0 comentarios
 

"If you want something said, ask a man. If you want something done, ask a woman.” Margaret Thatcher once said. In 1965. NINETEEN SIXTY FIVE. Today we like to talk about women’s rights and equality and what it’s taken to get here, a conversation that sometimes can get heated and often can turn virulent, and yet I’m not sure we ever pay enough attention to the real men and women who made this a discussion we can openly have. 

Today, we should. If, for nothing else, for Margaret Thatcher, who passed away this morning, at 87, and for the legacy she left behind. For the ideas she once defended. For what she wanted us to be, and have, and achieve. 

Now, Margaret Thatcher and I don’t agree on everything (okay, ANYTHING). Politics and ideals and the like are a funny thing, you can admire someone you have nothing in common with, and despise someone with the same values as you.  Values are not people, and the reverse also holds true. In some cases (most cases), the sensible course of action is to focus on the person, not on the ideals.  

The Iron Lady, as she is often called, was truly an example to us all. 

In a time where politics is filled with superficial men and women, with politicians too afraid to commit to anything that might hinder their rise, with ideals brandied about as a way to gain more votes, nothing more,  it’s hard to not sit down and admire a woman with the strength and determination to fight. And then fight again. And again.

Perhaps, without that example, a lot of women my age, and many who came before me, would still believe they’re not good enough, smart enough; would still  think that there are some positions that are reserved solely for men. Perhaps we wouldn’t know that we can be as good at politics, engineering, construction, and pretty much anything else we set our mind to.
Maybe, being a woman today would be much, much harder, without examples like Margaret Thatcher.

And, so, as John Steinbeck said, also a long time ago, proving that the idea of feminism as we like to use it was supported not only by women, “And finally, in our time a beard is the one thing that a woman cannot do better than a man, or if she can her success is assured only in a circus.”

Thank you, Iron Lady, for proving this point. Thank you for trying to prove all your points. Thank you, for trying. We’ll keep trying too.

miércoles, 13 de marzo de 2013

Los hombres, las mujeres y los deportes.

0 comentarios
 

Seguramente la idea de que los deportes son una cuestión masculina comenzó hace mucho, mucho tiempo. Quizás, cuando comenzó, tenían algo de razón. Originalmente los deportes fueron una cosa masculina (las pobres mujeres no podían hacer nada en esos tiempos), pero los tiempos han cambiado. (Y cómo han cambiado, ya los niños de dos años usar la cámara del celular, la Tablet, y quien sabe que mas).

La idea permanece, sin embargo. Si una mujer mira un juego de fútbol es porque quiere ver hombres corriendo en pantaloncitos cortos (Y si, como yo, mira un equipo como Argentina, donde no hay mucho eye candy que digamos, es porque tiene mal gusto), si una mujer ve un juego de fútbol americano es porque quiere ver a los jugadores en esos uniformes apretaditos, o porque le gusta el QB (Si, como yo, tu QB es Peyton Manning y lo amas con locura, pero eh, guapo guapo no te parece ni un poquito, ya eres un bicho raro. Deberías mirar a los Patriots. Tom Brady si esta bueno).  Si miras beisbol es más o menos lo mismo. Y si, de a casualidad, te gusta el tenis, no es porque te guste el tenis, obviamente, es porque te gusta algún jugador en especial, porque, a quien le interesa ver a dos tipos pegarle a una bola por horas y horas. (Si te gusta el tenis femenino eres lesbiana, de seguro).

Y, ¿saber de deportes? Entender la diferencia entre un lateral y un volante, poder ver un juego de fútbol americano y decir que el receiver tuvo la culpa de esa intercepción, no el QB, porque es obvio que corrió mal su ruta. Ver un homerun y decir, claro, eso lo bateo yo, si se la dejaron en medio del plato. Saber la diferencia entre forehand y backhand…ah, no, eso es el acabose. Y, si, para colmo, uno es una freak (como yo), de esas que puede contestar trivia y cosas así, de esas cosas que pasaron antes de que uno naciera. 

Entonces, pues, entonces uno está exagerando. Entonces ya no es tan divertido. Es que los deportes son, al final, una cosa de hombre. 

He escuchado todos estos comentarios en algún momento u otro. Curiosamente, los mismos hombres que dicen, ay, como me gustaría una novia/amiga/hermana que supiera de deportes, son los que luego se ponen bravos cuando quieres opinar sobre su equipo, si, al fin y al cabo, tú que sabes, eres simplemente una mujer.

No son todos, eh. No son todos. Las generalizaciones son malas. Así como no todas las mujeres aman los deportes (como yo), pues, no todos los hombres son machistas y les gusta pensar que lo saben todo.

Pero como hay, eh. Como hay, eh. 

A los que sí, a los que no, a los que medio medio….hoy, más que nunca, les deseo…una hija mujer. Una freak como yo. De esas que, después de un rato, discute con su papá, porque ya cree saber más. Para que vean que los tiempos han cambiado de verdad. Ya las mujeres no somos las de antes, oh no.

jueves, 17 de enero de 2013

Ser mujer es una cosa complicada

0 comentarios
 

No es broma, eh. Ser mujer es una de las cosas más difíciles que se puede ser. Es más difícil que ser cirujano, es más difícil que ser astronauta. Creo que es hasta más difícil que ser CEO de una gran empresa. O, en el fondo, es más o menos lo mismo. En serio. Más mujeres deberían tener puestos importantes, porque si la gente (y con gente me refiero a los hombres) pudiera comprender lo complicado que es ser mujer, sería realmente obvio que el día a día es suficiente experiencia de trabajo para cualquiera de esos high profile jobs

Además, ser mujer requiere aguantar dolor. Y mucho, eh. Todos los meses, ahí, sin falta, DOLOR.  Y eso es si NO estas embarazada. Ni quiero hablar del dolor que viene cuando SI LO ESTAS. Pero bueno, ese es el gran dolor de ser mujer. Pero hay muchos dolores chiquititos que nadie ve. (y con nadie me refiero, obviamente, a los hombres). Ah, es bien divertido burlarse de fulanita o menganita, porque como que no ha ido a depilarse últimamente, pero vamos…. ¿alguno de ustedes alguna vez ha ido a depilarse? ¿Tienen idea de lo mucho que duele? Noooooo. Pero esperan que las mujeres vayamos, mensualmente, ahí, como vacas al matadero.

Y, ¿sacarse las cejas? Les puede parecer tonto, pero duele, eh. DUELE. 

Pero eso no es todo, nooo. Además tenemos que estar arregladas siempre. Último grito de la moda. Pero hay una fina línea, eh. A la moda, pero elegante. Sexy, pero sin ser vulgar. Provocativa pero sin parecer puta. Carajo, hasta vestirse en las mañanas se está volviendo una cosa complicada. Últimamente recibo más comentarios sobre lo que me pongo de mis compañeros HOMBRES que de las mujeres. 

Ay, y más vale que hagas ejercicio. Todos los días. CUIDA LO QUE COMES. Nadie quiere una mujer gorda. En el resto de la gente (y con gente, me refiero, NUEVAMENTE, a los hombres), una pancita de cervecero es medio sexy. En las mujeres cero panza. Y nada de eso de que los tríceps se muevan cuando estas saludando. No, hay que estar flaca y tener los músculos definidos. 

Y tienes que saber cocinar. Todo el mundo espera que puedas prepararle la comida a tu marido cuando te cases, porque, obvio, te vas a casar, ¿no? A nadie le gusta una mujer soltera. Jajajajaja. ¡La dejó el tren! Pero un hombre soltero, eso es sexy. Miren a George Clooney si no me creen.

En fin, que ser mujer es una cosa bien, pero bien complicada. Requiere escuchar todo lo que la gente dice, piensa y espera de ti. Yo también creo que requiere aprende a ignorar todo eso mismo que la gente dice, piensa o espera de ti. Si no, pues, no se podría vivir. Y por eso es que las mujeres nos merecemos esos puestos de los que hablaba al principio. Después de un rato de vivir con las expectativas, ya nos estamos convirtiendo en expertas en hacerlo todo. Ah, y en que nos importe un bledo lo que diga la gente.

martes, 8 de enero de 2013

TSTL Syndrome or what the hell is wrong with heroines?

0 comentarios
 
This has probably been going on for a while, and I’ve been oblivious to the fact because I’ve been busy writing and/or reading books that were written half a century ago. I was craving a little variety, so I deviated from the fancy list of “Books I should read” to look for something light, and, somewhat fun. I’ve found real gems before while looking for a change, so I was quite confident I could find something I liked.
 
Maybe I should just go back to the same books, because right now, I feel like not even brain bleach could wipe out the apparently growing trend of the rather shallow/useless/anything but strong heroine. Sure, there have been good heroines and bad heroines for a long, long time, and I won’t even claim that I only read good books, because I’ve been known to read a book just for the LULZ, but I’m guessing we can blame Bella Swan (or Stephenie Meyer) for the current trend of TSTL heroines.

TSTL = too stupid to live.

Once upon a time I read the Hunger Games, and though I really, really liked the books, I found Katniss a bit hard to swallow at times. She was especially brave, and she never needed a guy to save her, but she didn’t know her own heart, and the whole romantic back and forth made me want to strangle her.

Today, I’m starting to appreciate Katniss more and more. At least she didn’t lie there, waiting for a guy (any guy), to save her. I’m not even asking for the heroine to WIN, she can fail miserably, but I, at the very least, expect her to …you know, TRY. Show a little original thinking. Don’t just sit there while the “hero” (and I use this term loosely. Heroines are becoming stupid and heroes are becoming possessive, violent, and, in some cases, almost abusive) comes to save the day. 

Oh, the times where YA heroines were modeled after Hermione Granger. How I miss those times. Hermione, who never needed anyone to save her. Hermione, who, often, had all the answers. And so many before here, in all those books I thought I needed a break from. 

Maybe I shouldn’t take breaks. Or, perhaps, I should resign myself to the age of TSTL heroines, and hope like hell it ends soon. But every time I pick up one of these books, I can’t help but think of those girls who are reading these books and didn’t get to see an example of real heroines, didn’t get to root for a real hero. And I keep thinking …maybe they think life is supposed to be this way. Maybe they will walk away liking it. And, maybe, maybe …they will go on to keep writing it, and this will never, ever pass.

God, I hope not. Just the thought makes me want to puke. 

What am I to do? Not much. Keep on reading. Rejoice every time I find a good heroine. Recommend the book to everyone. Pay really close attention to what I write. And, above all, keep complaining about the TSTL trend, even if people want to make a feminist out of me just because of it. 

I don’t think that word is an insult. I never have.
 
© 2012. Design by Main-Blogger - Blogger Template and Blogging Stuff